Derecho
de familia

Los casos con un componente familiar son especialmente delicados por cuanto los intereses en juego trascienden de lo puramente económico.

Así, afectan a las relaciones interpersonales y, no en pocas ocasiones, a menores de edad, de tal modo que las consecuencias que se puedan derivar de una crisis conyugal pueden acarrear situaciones críticas y permanecer sus efectos durante un largo periodo de tiempo.